"Subsuelo", de Marcelo Luján

Ficha técnica
- Título: Subsuelo
- Autor/a:
Marcelo Luján
- N° de páginas:
217
- Editorial:
Revólver
- Año:
2016 (2015)

Un día cualquiera, en verano, un matrimonio amigo se junta para cenar. Sus hijos adolescentes hacen las suyas cerca de la pileta. Lo único que lo diferencia de un día efectivamente cualquiera es que algo malo va a pasar.
Subsuelo no es una novela simple, desde ningún punto de vista. Lo único que uno podría considerar como más sencillo, teniendo en cuenta que podría resumirla en pocas líneas, es el eje central de la historia. Estaríamos en lo cierto si dijéramos eso. Pero Luján no se queda en esa premisa inicial; constantemente está complejizándola, y a medida que avanzan las páginas de esta peculiar novela el lector se va olvidando de esa aparente sencillez. Subsuelo se convierte en una historia retorcida, llena de matices para analizar, absorbente y perturbadora.

Lo cierto es que para conseguir esto, el autor recurre a determinados aspectos que, por un lado, mantienen al lector un tanto alejado de la historia y, por el otro, lo meten de lleno en ella. Es contradictorio, pero eso es lo que logra Luján con su interesantísimo estilo narrativo. Si en algún momento uno siente que no está entendiendo nada de lo que va ocurriendo, con el correr de la historia las cosas van poniéndose en su lugar y ahí es cuando la novela va tomando color. En un principio debo admitir que la forma de narrar del autor me confundía bastante. No entendía bien qué situación estaba planteando ni a qué quería llegar con los sucesos que narraba. No fue hasta llegar al el final del capítulo inicial (the kill) que empecé a entender mucho más a qué se refería el autor, y ahí fue cuando la novela comenzó a tornarse completamente adictiva.

Lo que más impacta de Subsuelo es, sin lugar a dudas, la forma en que está relatada. Más allá de que la trama y los personajes cumplen muy bien su rol, Marcelo Luján tiene un estilo muy interesante e ingenioso. Es como si constantemente estuviese rondando la idea principal,  pero sin caer en repeticiones que podrían tornar algo aburrida y cansina la lectura. Es decir, en las primeras páginas efectivamente sabemos qué va a pasar, porque nos lo hace saber expresamente. Todas las demás páginas se encargan de contarnos lo que se relaciona con ese hecho; más que nada, la psicología de los personajes. Luján hace esto de manera muy original, lo que da cuenta de un autor muy inteligente, y con una gran capacidad para manejar los tiempos de la historia; por lo tanto, consigue que el lector no pueda despegarse de sus páginas. El autor recurre durante todo el relato a los cambios temporales. Nos cuenta hechos pasados y también del presente, pero a su vez relata las situaciones en formato futuro: por ejemplo, “Eva hará tal cosa, Fabián estará en tal lugar”, y así. Esto hace que la narración se vuelva más intrigante, porque nos cuenta lo que estará por pasar sin que todavía haya pasado. Pero lo interesante es que esto no resulta como si nos estuvieran arruinando la historia, como si nos contaran algo así como un spoiler. Como la narración es completamente trepidante y fluida, y el autor combina los tiempos dentro de un mismo párrafo (o hasta también en las oraciones), uno no tiene ni una pausa como para replantearse determinadas cosas. Pero lo que es también muy interesante de analizar es que Luján logra transmitirnos a la perfección todo lo que va ocurriendo, a pesar de que parezca que la historia no se detiene en ningún momento. Su ritmo absorbente no impide que la novela carezca de profundidad. En la medida en que uno se mete en esta, empieza a entender cómo las piezas van encastrando sin dificultades, y ahí empieza a entender la gran capacidad que tiene el autor.

Otro de los factores mejor logrados de Subsuelo es la construcción de los personajes. Nuestros protagonistas, si se quiere, son tres adolescentes. Dos de ellos son hermanos (Eva y Fabián) y el otro (Javier) es amigo, que pareciera tener una suerte de relación amorosa con Eva. Si mencionamos que los personajes más importantes son adolescentes, esto seguro representaría que los mimos deberían tener una gran profundidad psicológica. Y Luján lo consigue de gran manera. Cada uno de ellos tiene una personalidad bien marcada y desarrollada; lo más interesante, por otra parte, es que el autor logra esto relatando apenas un hecho en particular. Un hecho muy importante, claro está, pero es solamente uno. La novela no nos plantea, por ejemplo, la transición de la adolescencia a la adultez de los personajes, en la que uno como lector podría pensar que es un buen tramo de tiempo como para que sus personalidades se desarrollen y puedan ser mostradas. El hecho al que hace referencia esta novela, con el correr de las páginas, da lugar a que se sucedan muchos otros que nos irán mostrando cómo es que estos personajes son en realidad. Más allá de la construcción de los protagonistas, uno quizás no pueda darse cuenta de la gravedad de las cuestiones que en la novela se tocan, porque en la mayor parte del tiempo está enfrascado en ella y completamente absorbido. Pero si por un momento nos abstraemos de la historia, podremos ver que se hace referencia a temas muy duros y complejos. Manipulaciones, abusos, amenazas y torturas psicológicas son algunos de ellos.

Subsuelo es una novela que se sale de los estándares de la novela negra más convencional. El autor logra meter de lleno al lector dentro de la historia, y con el correr de las páginas la lectura se va convirtiendo en una experiencia tan adictiva como perturbadora. Una historia, por otra parte, que alcanza un mayor grado de originalidad por cómo el autor maneja el factor tiempo. Subsuelo es, entonces, una novela muy interesante, por la profundidad psicológica de sus protagonistas y por cómo Luján consigue transmitirnos los hechos más importantes del relato.
Puntuación final

8/10

Comentarios