- Autor/a: Ignacio Apolo
La experiencia de leer La apropiación no es fácil ni de definir ni de explicar. Los pensamientos e ideas que tuve a lo largo de la lectura fueron cambiando, a medida que la historia se iba desarrollando e iban apareciendo nuevos personajes y nuevas historias paralelas al argumento principal.
La protagonista de esta historia, Julia, es una psicóloga que se interesa en un caso particular de Caty, una nena de diez años, sorda, con capacidades especiales para la pintura y el dibujo. A partir de iniciar el taller artístico del que Caty participa, ella empezará a indagar no solo en lo que respecta al mundo de los que no pueden escuchar, sino de la propia historia de Caty, que encierra gran cantidad de secretos y misterios que Julia deberá ir descubriendo.
Lo más sensato para describir mi experiencia con La apropiación sería dividir la lectura en tres partes. El primer tercio de la novela no fue la mejor. Al ser el principio, la historia estaba poco desarrollada, y no es posible identificar a la perfección a qué apunta el autor o la misma novela con tan pocas páginas en el medio. Por lo tanto, en esta parte no me adentré de lleno en el argumento, sino que mi posición era más de observación o de ver qué era lo que el autor me quería decir con tal o cual cosa. No podría decir que esta parte de la historia me resultó aburrida, pero sí estaba en una postura expectante, en el sentido de que estaba constantemente esperando que algo impactante sucediera para que la novela se "abriera" y me adentrara más en ella.
Pasadas las primeras cien páginas de la novela la historia empezó a tomar forma, a partir de un hecho particular. A partir de este momento, sí se me hizo mucho más fácil avanzar con la novela sin pensar en que esta no me estaba convenciendo del todo. De hecho, tardé más en leer el primer tercio que los dos restantes. El hecho de que el argumento me interesara más no significa que este fuera más claro, sino más bien lo contrario. En esta parte de la historia los hechos se suceden casi de forma precipitada, y muchas veces es difícil discernir si lo que está pasando es completamente real o es parte de la acomplejada mente de la protagonista; pero creo que este es uno de los condimentos más fuertes que tiene La apropiación: que todo el tiempo los lectores son los que tienen que parar un momento y pensar, ¿esto es cierto, o no? ¿Qué me quiere decir el autor con esto? ¿Qué significa? Si bien en algunos momentos me pareció un poco frustrante no entender bien qué estaba pasando me pareció que en general esto le daba a la novela algo interesante, original.
Muchas veces sucede que uno empieza un libro y le gusta desde el principio, y luego el ritmo de la historia decae hasta desembocar en un mal final, o en un desenlace que no cumple con las expectativas del lector. En La apropiación pasa algo inverso. Como ya se explicó antes, el inicio no es lo mejor de la historia, pero lo que viene luego empieza a tomar fuerza. A medida que seguía con la lectura el sentimiento de querer saber la verdad o de cómo todo se iba a relacionar fue creciendo en intensidad. Esto es, la mayoría de las veces, un buen indicador, algo que demuestra que una novela te está interesando.
Con respecto a la prosa del autor, en algunos momentos de la novela me pasó que, acompañado con el hecho de la falta de claridad en los hechos, tampoco sabía bien qué estaba queriendo decir el escritor con alguna que otra frase u oración. En otras partes de la novela, también había muchos párrafos en los que se hablaba bastante de la naturaleza de la sordera o de las sensaciones y pensamientos humanos, y eso me generaba cierta confusión. Más allá de esto, en promedio puedo afirmar fehacientemente que Ignacio Apolo es un buen escritor, que sabe de este tan difícil oficio que es la escritura.
En conclusión, La apropiación me pareció una novela entretenida en la mayor parte de su desarrollo, con un inicio un poco lento que luego, con el correr de las páginas, va tomando ritmo. Es una historia que trata un tema más que interesante como lo es el de la sordera, y el de la comunicación en general. Un libro para seguir conociendo escritores nacionales, del cual no me arrepiento de haber leído.
Puntuación final
7/10
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